La Vida —Antes y Despues

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STOS versículos, al principio del segundo capítulo de Efesios, me recuerdan mis días universitarios. Mientras era estudiante en la universidad, tenía un trabajo durante las vacaciones –y creanlo o no, era en un hospital. Porque tenía un poco de conocimiento de química, fuí transferido al Laboratorio. Me dijeron, ‘listo, vamos a entrenarte en Patología, en Biología y en la preparación de especímenes’ lo cual incluía autopsias. Así que tenía que ir a la morgue y mirar mientras el cuidador hacía autopsias. Entonces él dijo: ‘Jack’ (era conocido como Jack, porque mi segundo nombre es Jacobo) ‘dentro de un par de días será tu turno. ¿Pueden imaginarse como me sentí? Bien, tuve que proceder y aclarar mi situación. Les dije: ‘En verdad, esto no es mi fuerte; deseo estar en Química y no en Biología’. El resultado fue que me regresaron a donde tenía que transferir a los pacientes a la sala de operaciones y regresarlos también. Respiré un suspiro de alivio, y mi novia también. Tuve que contárselo a Judith (su esposa) y ella, igualmente, dio un suspiró de alivio.

Pero noté que cuando ejecutaban las autopsias y mientras examinaban los cadáveres, que de esos cuerpos muertos no hubo ninguna reacción, ni un grito de dolor, ya que cuando una persona está muerta ya no hay sensación ; no hay respuesta alguna ; no hay más. Y lo que Saulo está diciendo aquí es : que —en nuestra condición natural— eso es exactamente lo que somos. Espiritualmente, somos totalmente insensibles e incapaces de responder.

 

Hable usted de cosas espirituales con una persona que no es salva ; que no es creyente, —les pasa por encima de sus cabezas— no les significa nada. Puede hablar hasta el cansancio, pero mientras DIOS no les abra el corazón, es como si uno viniera del planeta Marte y les está hablando. No les significa nada, no les hace ningún sentido —en todo. No pueden entender lo que uno les esta diciendo. He tenido esta experiencia una y otra vez. Es como estar hablando a una pared. Sus palabras son malgastadas en el aire. ‘Ahora’, dice Saulo, ‘así eran ustedes antes de que Él les diera vida.’ Espiritualmente muertos, igual como uno que está muerto físicamente ; y no hay esperanza para cambiar ; sin esperanza para mejorar, ¡ aparte del poder sobrenatural y milagroso de DIOS !

 

DIOS habla a Su Pueblo en Isaías, Capítulo 59, versículos 1 y 2 : ¡He aquí! que no se ha acortado la mano de DIOS para salvar, ni se ha agravado su oído para oír, pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro DIOS, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír! Quedaremos en esa situación hasta que DIOS actúe ; ¡ estamos espiritualmente muertos !. Al mismo tiempo, sin embargo, la muerte espiritual no es lo mismo que la muerte física. Una persona que está muerta espiritualmente, continúa en sus pecados, porque Él dice, ‘entre los cuales también todos nosotros vivimos y anduvimos en otros tiempo’ . Usted está espiritualmente muerto y sin embargo no hay paro de actividad pecaminosa ; porque no cesan los malos hábitos que uno comete —en pensamiento, en palabra, y en acción. Pero eso es lo que la Biblia llama muerte espiritual. Separación de todo lo que es santo. El alejamiento de DIOS. La separación total de Él quién es la fuente de la vida verdadera. Seguimos en nuestros caminos a nuestra manera, alocada y sin ningún cuidado.

 

Él habla de delitos y pecados ; ‘Cuando estabais...’ Gracias a DIOS, Él habla acerca de nosotros en tiempo pasado. Espero que Él nos esté hablando a cada uno de nosotros aquí presentes, en tiempo pasado. ¿ Cual es la diferencia entre delitos y pecados ? Pues delitos son malas acciones perceptibles. Estos identifican la condición interna ; estos demuestran los síntomas de nuestra condición. Uno de nuestros niños empezó a sangrar de la nariz y empezó a llorar y a ponerse gruñón. Nosotros nos preguntamos si

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era un resfrío, o la gripe. No fue ni uno ni el otro. Lo que fue, es lo que es llamado síntoma pródromo de sarampión. ‘Pródromo’ significa malestar que precede a una enfermedad. Si una criatura va a tener sarampión, uno de los síntomas avanzados es que empiezan a sangrar por la nariz, sus ojos se les ponen rojizos y llorosos y se ponen malhumorados. Esa es una de las señales de que el sarampión se avecina.

 

Y aquí tenemos los síntomas de la enfermedad : los delitos ; la manera en la cual las personas actúan. El SEÑOR IESHÚAH dijo : “por sus frutos los conoceréis”. Cuando nosotros vemos a alguien quien dice : ‘Ah sí, soy Cristiano, creo en JESUS’. y usted mira y contempla su vida, su modo de vivir, y no puede distinguir entre él y otros que están viviendo vidas de abandono, entregados a los vicios, etc., entonces uno tiene que decir : ‘¿ Dónde esta la evidencia ? ’ Uno tiene que preguntarse : ‘¿ Dónde esta la evidencia ? lo único que veo es fruta mala ; no veo fruta buena.’ Delitos.

 

Pero con respecto a pecados, se refieren al motivo o fundamento principal maligno que gobierna las acciones. En estos versículos sobresalen condiciones contrastantes. Uno podría escribir un titulo : “ Antes y Después ”. Él dice : “Cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados ... y ahora estáis vivos en Mashíaj” (Ef. 2:1 y 5) Ustedes eran hijos de desobediencia ; y ahora son hijos de DIOS. Ustedes tenían al diablo morando dentro de ustedes (o los gobernaba) ; ahora tienen ustedes al Rúaj ha Kódesh (Espíritu Santo) morando dentro de ustedes. Cuando le pidieron a Balaam que maldiga a Israel, él dijo : ‘No puedo maldecir. He recibido mandamiento para bendecir, y no puedo hacer lo contrario.’ Y él continuó diciendo : ‘ Llegará un día cuando la gente va a mirar a la nación de Israel y dirán con asombro, ¿ Que es lo que DIOS ha hecho aca ? ¡ Que transformación tan maravillosa ! De dos millones de refunfuñadores descontentos en el desierto — a ¡ gente feliz llena de alabanzas !’. ¿ Que es lo que ha causado esta diferencia ?

 

Eso me recuerda a otra historia acerca de un médico. El era el terror del hospital porque era brillante, y todos tenían que estar en puntillas y dispuestos a saltar. Él era tan rápido que las enfermeras decían : ‘Ah, ah, ya viene’ y todas se ponían en pánico, con la excepción de una enfermera que era Cristiana. Él quiso saber cual era la diferencia. ‘Enfermera, ¿ cual es su secreto ?’ Ella le dijo que IESHÚAH era su secreto —y ese fue el primer paso para que él se convirtiera en Creyente. Y ahora, ¿ que hay de usted ? Donde se encuentra usted ? ¿ Antes o después de la vida ?